(hasta el día 10 de julio de 2008)
“Aquella tarde huyeron todos de la playa, el viento llenó el aire de ruido, la lluvia desgarró las nubes y el mundo parecía librar una batalla. Observé que el mar se batía contra sí mismo y aunque yo estaba en la orilla apenas me tocaba.
Entonces vi una pluma que, ajena a la tormenta, se dejaba acariciar por las olas ya vencidas. Mi piel se esponjó para sentir, mi mente se llenó de atención, acompañé el baile de esa pluma tomándole fotografías. Pensaba en un anónimo espectador mientras estudiaba la manera de trasmitirle el gozo de esa pluma y esa ola, para que él también sintiera”.
EL FOTOMATA - C/Mata, nº 20 - 41002-Sevilla
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